En la industria del estilismo y la belleza se gasta una cantidad considerable de dinero en productos que alisan el cabello, que van desde planchas hasta productos químicos. Para beneficio de muchas, la misma naturaleza brinda algunos productos que, con un poco de ingenio, se pueden usar para alisar el cabello de manera natural.

Así también, hay técnicas simples que no requieren que aplanches tu cabello, algo que puede provocar que se seque y se maltrate si lo haces muy seguido. En seguida te contamos de estos productos y técnicas, y cómo puedes sacar provecho de ellos.

La leche de coco
Se sabe que la leche de coco actúa como un importante alisador del cabello, además de que esta solución es muy fácil de preparar. Lo que tienes que hacer es extraer leche de coco, colocando pedazos de coco en una licuadora junto con unas 4 o 5 cucharadas de jugo de limón y licuar hasta obtener una sustancia que puedas aplicar en tu cabello, colándola para retirar los pedacitos que quedan del coco.

Si no puedes conseguir coco entero, puedes comprar leche de coco, pero asegúrate de que sea pura y no contenga aditivos. Retira la solución de la licuadora y colocándola en la nevera o refrigeradora por alrededor de una hora, hasta que notes una capa espumosa. Usa esa capa, aplicándola en tu cabello y cuero cabelludo. Después, cubre tu pelo con una toalla y espera por poco menos de media hora. Enjuaga tu cabello, péinalo y nota cómo es más fácil de manejarlo y darle el estilo que deseas, con mucho menos encrespamiento.

Leche y huevo
Para darle una buena dosis de proteínas a tu cabello, mezcla 2 tazas de leche con un huevo, revolviendo bien. Puedes sumergir tu cabello en la mezcla o untarla en tu pelo. Después, procede a cubrir tu pelo con un gorro de ducha o una bolsa y espera por cerca de media hora. Por último, lava tu cabello con agua fría (el agua caliente podría hacer que la parte de huevo de la mezcla se endurezca y se vuelva difícil retirarla) y péinalo.

Hay una advertencia al hacer este tratamiento, la cual es evitar que el huevo crudo entre por tu boca o entre en contacto con tus ojos. El huevo crudo puede contener patógenos, así que al enjuagar tu cabello hazlo de manera que los residuos corran por la parte de atrás de tu cabeza, no por tu cara.

Aceite de oliva
Aunque el aceite de oliva no actúa directamente como un alisador, sí ayuda significativamente a hacer el pelo más manejable, suave y fácil de peinar, lo cual es muchas veces todo lo que necesitas. Para este tratamiento, mezcla unas 5 cucharadas de aceite de oliva extra virgen con miel de abeja. Añade la miel poco a poco, revolviendo y estando atenta hasta notar una consistencia que sea fácil de aplicar, sin que se vuelva demasiado espesa.

Aplica esta mezcla en tu cabello, masajeando cuidadosamente y uniformemente. Cubre tu pelo con un gorro de ducha o una bolsa plástica para que los beneficios de esta mezcla sean absorbidos por tu pelo eficientemente. Después de una hora, lava tu cabello como lo haces de costumbre y verás los resultados.

                                          NO DEJE DE VER ESTE VÍDEO