El uso de los implantes dentales ha supuesto uno de los cambios más importantes en la práctica odontológica. Un método para reemplazar las piezas dentales perdidas que resulta, si cabe, aún más relevante en España, dado que es uno de los países de la Unión Europea en el que se realizan más implantes –hasta 800.000 solo en 2014–. Sin embargo, estos implantes no están exentos de complicaciones y pueden llegar a ‘fracasar’ y perderse, muy especialmente por la aparición de una ‘periimplantitis’, esto es, un proceso inflamatorio destructivo que afecta a los tejidos que rodean al implante y que se produce por la formación de biofilms por las bacterias de la cavidad oral sobre el propio implante. Tal es así que en los últimos años se han desarrollado numerosos estudios para reducir, cuando no eliminar, el riesgo de periimplantitis. Y ahora, investigadores de la Universidad de Plymouth (Reino Unido) podrían haber dado con una manera muy eficaz para lograrlo. Concretamente, el estudio, publicado en la revista «Nanotoxicology», describe u n nuevo ‘nanorrevestimiento’ de plata, hidroxiapatita y óxido de titanio que, una vez recubre el implante, inhibe el crecimiento de las bacterias y reduce en hasta un 97,5% la formación de biofilms bacterianos sobre la superficie del propio implante. Como explica Alexandros Besinis, director de la investigación, «las estrategias actuales para dotar a las superficies de los implantes de propiedades antibacterianas y, así, prevenir la infección y el desarrollo de periimplantitis incluyen la aplicación de recubrimientos antimicrobianos cargados con antibióticos o con clorhexidina. Sin embargo, estas estrategias son, por lo general, únicamente eficaces a corto plazo. Y parece que el empleo de clorhexidina podría ser tóxico para las células humanas. La importancia de nuestro trabajo es que hemos aplicado con éxito un nanorrevestimiento de doble capa de plata-hidroxiapatita a los implantes médicos de aleación de titanio que ayuda a superar estos riesgos». Más allá del titanio Para llevar a cabo el estudio, los autores evaluaron la eficacia antibacteriana de los nuevos ‘nanorrevestimientos’ en placas de laboratorio con cultivos de ‘Streptococcus sanguinis’, bacteria que habita comúnmente en la placa dental y que, de alcanzar el corazón tras entrar en el torrente circulatorio, constituye la principal causa de endocarditis bacteriana. Nuestro hallazgo tiene un gran potencial para aumentar el confort y satisfacción de los pacientes, así como para reducirChristopher Tredwin Los resultados mostraron que la combinación de plata, hidroxiapatita y óxido de titanio no solo erradicó de forma muy efectiva la infección, sino que creó una superficie con propiedades anti-biofilm que facilitan la integración exitosa del implante en el hueso y aceleran el proceso de curación ósea. Como indica Christopher Tredwin, co-autor de la investigación, «en nuestro estudio hemos identificado la manera de proteger los implantes dentales frente a la causa más común de su fracaso. Nuestro hallazgo tiene un gran potencial para aumentar el confort y satisfacción de los pacientes, así como para reducir costes, por lo que seguiremos trabajando para trasladarlo a la práctica clínica». Aún habrá que esperar
El equipo de investigación dirigido por Alexandros Besinis lleva años trabajando en el desarrollo de materiales avanzados y en el empleo de la nanotecnología para construir nuevos biomateriales e implantes médicos que mejoren la prestaciones mecánicas, físicas y antibacterianas de los actualmente comercializados. Fruto de este trabajo es este nuevo ‘nanorrevestimiento’ para los implantes dentales, producto que, sin embargo, aún requiere ser evaluado en nuevos estudios antes de que pueda ser susceptible de ser utilizado en la práctica clínica. Como concluye Richard Handy, co-autor de la investigación, «el próximo paso será demostrar la efectividad de nuestro hallazgo, quizás en principio con modelos animales y, posteriormente, en voluntarios sanos».