La miel está considerada como un alimento bastante nutritivo y saludable.

A nivel mundial se consume en grandes cantidades, no solo por su aporte medicinal, sino también por su sabor, el cual la convierte en un ingrediente único y especial.

Antes de consumir la miel hay que cerciorarse sobre el tipo de procedencia.

En términos normales existen dos orígenes. El primero de ellos se considera natural y el segundo es industrial; aunque estos son bastante similares pueden diferenciarse, más aún con respecto a sus propiedades.

 

  • La miel de origen natural es fabricada por abejas.  Este tipo es el más saludable que existe y, por ende, es la más recomendada tanto para el consumo como para otros fines.
  •  Por otra parte, la miel de origen industrializada es elaborada por el hombre. Este tipo surgió ante la necesidad de suplir la fabricada por las abejas, haciéndola más fácil de obtener, pero menos saludable.

En comparación, ambas categorías se distinguen por su textura, siendo la natural mucho más espesa y viscosa, aparte de contener un mayor número de oxidantes y vitaminas.

Con base en lo anterior se busca aclarar las diferencias entre ambos tipos de miel. Además, se recomienda estrictamente el consumo de la natural, ya que es posible desarrollar diferentes problemas médicos al ingerir la industrializada.

A continuación exponemos algunos usos que seguramente desconocías de la miel de abejas.

1. Combatir el acné

5 beneficios saludables que no conocías de la miel

Aunque la miel en su rol primario es un ingrediente alimenticio, también puede emplearse con otros fines. Lo ideal es obtener los beneficios que ofrece de la manera más factible posible.

Por ello, se debe afirmar la posibilidad de aplicarse de forma tópica; en el caso de padecer una enfermedad cutánea como el acné, la miel llega a ser una gran alternativa.

Para aprovechar los efectos positivos de esta se recomienda aplicar un poco justo en el área afectada.

Aunque para combatir el acné existen más alternativas, tanto naturales como industriales, la miel es una de las más sencillas, económicas y útiles existentes, además de ser completamente saludable.

 

2. Mejorar la función del cerebro

5 beneficios saludables que no conocías de la miel

Una de las principales funciones de la miel es la contribución a la absorción y fijación del calcio en el cuerpo.

Es allí donde desempeña un papel fundamental frente a la función cerebral, siendo esta dependiente de la presencia de este elemento químico (calcio) en el organismo.

Cuando se consume miel regularmente las neuronas actúan de forma apropiada frente a la utilización de este elemento, de forma que mejoran  la función cerebral.

Por otra parte, un beneficio más de su consumo con respecto al principal órgano del sistema nervioso central es la de optimizar la memoria a corto y largo plazo.

3. Curar los síntomas de la tos

Dentro de las propiedades de la miel destacan las características antibióticas y antisépticas. Estas suelen ser muy efectivas para aliviar las bacterias causantes de los síntomas asociados con la tos.

Su consumo también contribuye en el tratamiento de dolores de garganta y malestar general producido por la gripe.

La manera de consumir este alimento para obtener beneficios con este fin puede variar. No obstante, una cucharada puede contrarrestar todos esos males, y favorecer la expectoración.

4. Fortalecer el sistema inmunitario

 

5 beneficios saludables que no conocías de la miel

como hemos mencionado anteriormente, este delicioso alimento tiene propiedades antisépticas y antibióticas y, además, también cuenta con fitonutrientes y es antibacteriana.

Dichos componentes hacen de la miel una gran alternativa para fortalecer al sistema inmunitario.

Y es que no solo se encarga de eliminar microorganismos de diversas zonas, también evita su aglomeración en fosas nasales y poros, que son las principales entradas de las bacterias.

 

5. ¿Aliviar heridas con miel?

 

5 beneficios saludables que no conocías de la miel

De nuevo cabe mencionar la propiedad antibacteriana, puesto que es una de las más beneficiosas para el organismo en general.

En este caso, no debe consumirse sino aplicarse de forma tópica, al igual que indicábamos al principio del artículo en el tratamiento del acné.

En términos generales, la miel es apropiada para cualquier tipo de afección cutánea, incluyendo las heridas.

  • Para aplicar la miel se recomienda, en primer lugar, lavar muy bien las manos.
  • Si es posible, emplearemos guantes y esterilizaremos el artefacto con el cual se pondrá el ingrediente en la herida.
  • Trataremos que cubrir totalmente la zona afectada.
  • Una vez tapada, colocaremos encima una venda estéril.