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Cultivar laurel en el huerto, el jardín o en macetas es una excelente manera de enriquecer su biodiversidad y aprovechar los usos culinarios y medicinales de esta planta aromática. Muchas eran las culturas antiguas que apreciaban las propiedades medicinales del laurel.
El laurel es una planta arbustiva que crece de forma silvestre en países de la zona del Mediterráneo. Esta planta pertenece a la familia botánica Lauraceae y su nombre en latín es Laurus nobilis. Es una planta perenne, con un tronco delgado con corteza oscura y muy frondoso. Las hojas, la parte utilizada del laurel con fines medicinales y culinarios, son muy aromáticas, ovaladas, estrechas y de verde oscuro.
El laurel también se cultiva como arbusto ornamental y podemos plantar laurel tanto directamente en la tierra en jardines, parques y huertos como en macetas en terrazas, patios, etc.
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Cómo cultivar laurel en el huerto o jardín.
Siembra y multiplicación del laurel: podemos comenzar a cultivar laurel sembrando las semillas en semillero o por siembra directa, también podemos realizar esquejes de plantas adultas o bien multiplicarlo por los hijuelos que brotan alrededor de la planta madre. Las semillas se deben mantener con humedad constante y a temperaturas de entre los 20 a 23 ºC para que germinen.
Sustrato: tanto si vas a cultivar laurel directamente en la tierra como si lo haces en macetas, esta planta necesita suelos profundos, con buen drenaje y con buen aporte de materia orgánica. Para el cultivo en maceta debemos usar una maceta con una profundidad mínima de 50 cm y un diámetro de 60.
Clima: prefieren el clima Mediterráneo, aunque pueden aguantar bien cortos periodos de frío con temperaturas a menos 0ºC.
Luz: el laurel no es un cultivo exigente en este sentido, se puede cultivar tanto a pleno sol como en semisombra. Eso sí, evita ubicarlo en una zona con vientos constantes o fuertes porque sí puede ser sensible a éstos.
Riego del laurel: necesita riegos regulares, sin abusar de la cantidad de agua. No debemos regar copiosamente porque al laurel no le gusta el exceso de agua. Si pones el riego por goteo mucho mejor, se dosifica el agua, la planta tiene un suministro adecuado y no desperdiciamos este bien tan preciado.
Poda del laurel: para favorecer la salud general de la planta, se suele podar una vez al año, preferentemente en invierno. Siempre con tijeras bien limpias, retiraremos hojas y ramas viejas o estropeadas.
Plagas y enfermedades del laurel: las enfermedades más comunes son los hongos (por exceso de riegos), y de las plagas los ácaros como la araña roja, cochinilla y el pulgón.
Cosecha: a partir de que nuestro árbol de laurel tenga un año, en cualquier momento podemos ir tomando las hojas que necesitemos.
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