• 1. Mejora la conexión entre neuronas
  • 2. Protege el cerebro de la oxidación
  • 3. Pone en marcha las mitocondrias
  • 4. Reduce la inflamación
  • ¿Qué es el sulforafano?
  • ¿Cuáles son los alimentos más ricos en sulforafano?

Sobre el brócoli solo se dicen cosas buenas, y siempre se pueden decir más cosas buenas sobre este alimento. Si cortas un brócoli por la mitad, lo que ves te recordará seguramente a un cerebro, y resulta que las propiedades del compuesto más peculiar del brócoli, el sulforafano, benefician especialmente a nuestra materia gris. Parece cosa de magia y quizá lo sea.

1. Mejora la conexión entre neuronas

El sulforafano aumenta las denominadas «proteínas de choque térmico» que mejoran la comunicación entre neuronas a través de las sinopsis.

Esta propiedad del sulforafano ha hecho que se investigue su utilidad en el tratamiento del autismo, pues el comportamiento de las personas afectadas por esta enfermedad mejora cuando se estimulan estas proteínas.

De hecho las cuatro propiedades del sulforafano que explicamos en este artículo están indicada en el tratamiento del autismo.

2. Protege el cerebro de la oxidación

El estrés oxidativo que causan los radicales libres en todos los órganos del cuerpo, incluido el cerebro, son causa de inflamación, enfermedad y degeneración.

El organismo tiene sus propios recursos antioxidantes pero los alimentos aportan muchos compuestos que le ayudan a combatir los radicales. El sulforafano es uno de ellos, pero no es uno más, como las vitaminas C y E, minerales como el selenio o compuestos vegetales como el betacaroteno. El sulforafano es la molécula natural con mayor capacidad para aumentar los niveles de Nrf2, señalador que desencadena la respuesta antioxidante en el cuerpo.

El Nrf2 se considera «un regulador maestro» de la respuesta del cuerpo a los factores ambientales estresantes. Aumenta la actividad de todo tipo de genes protectores en las células, que desactivan los radicales libres y facilitan la reparación de proteínas y ADN.

3. Pone en marcha las mitocondrias

Las mitocondrias son orgánulos de las células cuya función es producir energía a partir de la glucosa, de ácidos grasos o de proteínas. Cuando te sientes cansado, una razón puede ser que las mitocondrias no están funcionando a tope.

De nuevo, el sulforafano es capaz de aumentar el número y mejorar el funcionamiento de las mitocondrias y, con ello, equilibra el metabolismo.

Esta propiedad resulta especialmente interesante para el cerebro, el órgano que más energía consume.

4. Reduce la inflamación

La neuroinflamación o inflamación del cerebro está detrás de muchos trastornos degenerativos que pueden afectar a este órgano. Las personas con un exceso de inflamación muestra niveles altos de una proteína llamada NF-kappa-beta.

Como no, el brócoli reduce la proteína NF-kappa-beta y en consecuencia la inflamación, gracias al sulforafano.

¿Qué es el sulforafano?

El sulforafano es un isotiocianato derivado de la glucorafanina y se encuentra en gran cantidad en la familia de las crucíferas, especialmente en el brócoli.

El sulforafano se activa cuando la glucorafanina entra en contacto con la mirosinasa, una familia de enzimas que desempeñan un papel en la respuesta de defensa de las plantas.

Su consumo está asociado a un menor riesgo de infarto del miocardio y de cáncer. Además, sus efectos están siendo estudiados en enfermedades neurodegenerativas, diabetes y aterosclerosis.

¿Cuáles son los alimentos más ricos en sulforafano?

  • El brócoli (y aún más, los brotes de brócoli) es la fuente mas común de sulforafano, pero este también se encuentra en otros alimentos:
  • Coliflor
  • Col rizada
  • Coles de Bruselas
  • Repollo, tanto morado como blanco
  • Bok choy
  • Berro
  • Rúcula

Las verduras crudas tienen los niveles más altos de sulforafano: el brócoli crudo contiene diez veces más sulforafano que el cocido.

La manera más recomendable de cocinar el brócoli es al vapor y solo durante 1 a 3 minutos. Si calientas el brócoli por encima de los 140 °C se pierde gran pare de la glucorafanina, precursora del sulforafano.

Por esta razón, es mejor evitar hervir o calentar verduras crucíferas en el microondas. En su lugar, cómelos crudas o ligeramente cocidos al vapor para maximizar su contenido de sulforafano.

Para potenciar la formación de sulforafano se puede aliñar el brócoli con mostaza, porque es muy rica en mirosinasa.